Reconocer personas con energía negativa
El mundo de la energía se desenvuelve entre los polos positivo y negativo. Lo negativo es aquello que de alguna forma hace que la energía adquiera un tono oscuro. Algunos consideran a la energía negativa como un tipo de energía que hace que las personas se aferren a lo que no es esencial en la vida.
Las personas que tienen cierta tendencia a intervenir con su energía oscura pueden poner en riesgo nuestra felicidad.
Pero veamos entonces cómo reconocer a personas con mala energía y sobretodo, cómo protegernos.
Cómo reconocer a personas con mala energía:
Saber y protegerse
Las personas con mala energía por regla general son personas que no sonríen y que tienen una actitud quejosa hacia el entorno, también existen personas que pueden ser muy amables y sonrientes pero que en el fondo ocultan una mala actitud, hay que ver intuitivamente qué sentimos cuando estamos ante estas personas.
No siempre aquel que no sonríe o tiene una actitud un tanto oscura son personas con mala energía, y no siempre las personas falsas son personas que nos pueden perjudicar energéticamente.
Hay que saber entender que una cosa es un problema psicológico o una actitud formal hacia la vida y otra la real mala energía.
Una forma de reconocer a las personas con una onda perjudicial es observar si cuando la persona se acerca sentimos un súbito dolor de cabeza. Otro síntoma de que alguien es perjudicial es observar si cuando la persona se va nos quedamos cansados y faltos de vitalidad.
En cualquiera de los casos lo principal es protegerse. Pero…¿cómo hacerlo?
Hay que tratar de generar un campo energético al rededor nuestro que no permita penetrar la mala onda, el campo puede fabricarse con una fuerte mentalización o respirando profundamente, tratando de alejar a la onda negativa.
Cualquiera sea la forma que elijamos lo importante es no dejar penetrar a la energía que nos trae la negatividad.
Saber detectar a las personas con mala energía es un arte, pero con un poco de práctica , pronto sabremos ver quienes son aquellos que nos aportan alegría y bienestar, y quienes no.
Hay que alejarse de aquellas personas que intentan perjudicarnos energéticamente o robarnos nuestra natural alegría.