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5 Principales Errores en el transgeneracional


 QUE NO HACER!



ERROR Nº1 – MIRAR EL ÁRBOL DESDE ARRIBA HACIA ABAJO.

Algo muy normal (y por normal me refiero a abundante), es encontrarme con personas que cuando les pregunto: ¿cuál es el motivo de tu consulta? Me contestan: Uff! Es que mi árbol es muy tóxico…
El principal problema de estas personas es que están mirando su árbol de arriba hacia abajo. Creen que porque a alguien de su familia le ocurrió cierta situación o tuvo alguna enfermedad, a él/ella también le va a ocurrir. Esto no tiene porqué ser así.


Consecuencia: viven con miedo a tener un problema que en la gran mayoría de los casos nunca van a tener.
Un poco como decía Mark Twain: “He tenido innumerables problemas en mi vida. La mayoría de ellos nunca ocurrieron.”
El miedo a sufrir, es peor que el propio sufrimiento, por lo tanto este juego del ego no tiene ningún sentido.

El transgeneracional tiene sentido cuando se parte desde un síntoma, ya sea físico, emocional o social. Y es a través de este síntoma que puedes descodificar en tu árbol una historia concreta, y aportar una solución diferente al conflicto vivido por un ancestro.
Esto es mirar el árbol desde abajo hacia arriba, es mirar el árbol desde el amor y la comprensión, y esto sí que tiene sentido.

ERROR Nº 2: NO VER EL RECURSO (PONER EL FOCO EN EL PROBLEMA O CONFLICTO).

Tiene que ver con la historia que nos contamos, que en realidad es una mentira o una medio-verdad subjetiva de la cual nos autoconvencemos continuamente y que tiene la intención positiva de mantenernos en nuestra zona de confort.
En resumidas cuentas, no quiero asumir mi responsabilidad y por supuesto no quiero actuar. Prefiero seguir echándole la culpa de mis problemas a mi árbol o más concretamente a mamá, papá u otro miembro de mi clan.
La verdad es que la mayoría de los conflictos que sostenemos, ya fueron solucionados, y aunque en nuestro inconsciente está la solución al lado del problema… nuestro foco está en el problema y en los juicios que tenemos hacia alguna o algunas personas de nuestro clan.
Solución: cambiar la forma en que miro mi árbol, darme cuenta de los recursos y esto a veces requiere un trabajo terapéutico previo.
Nos podemos preguntar ¿qué se le daba bien a…? ¿qué aportaba de positivo para la familia …? ¿de qué situaciones salieron airosos mis ancestros?
Todos esos recursos los tenemos nosotros, a veces no los vemos sólo porque nuestro enfoque está en el problema. Enfócate.

Recuerda que “Hay una fuente al pie de todo aquel que muere de sed”.

Error Nº 3: PENSAR QUE YO SOY EL SALVADOR DE LA FAMILIA.

Pues eso, creer que yo soy superespecial, como un santo, un salvador, un superheroe, un iluminado, etc… y que yo vengo a salvar a mi familia. Pensar que tu clan dejó programas tóxicos y que tú vienes a solucionar esto y además a salvarlos a ellos.
Esta forma de mirar tu árbol esconde tras de sí un especialismo egóico (del que habla Un Curso de Milagros) una manera de decir yo soy bueno (porque de hecho necesito sentirme bueno) y el resto son malos, son “pecadores que yo tengo que liberar de sus pecados”.
Ya lo se, estoy exagerando un poquito, pero bájale la intensidad y dime que no se te ha pasado por la cabeza esta idea. Es una idea separatista y soberbia. Una forma de sentir que no perteneces a tu clan, que estás incluso por encima de ellos y pensar así te puede llevar a un camino difícil, incluso a un bypass espiritual que, créeme, no te ayudará.
De verdad que este error es más común de lo que imaginas, y es un gran error.
Solución: Cambiar nuestra mirada, a una mirada de humildad hacia nuestros ancestros, de reconocer en cada uno de ellos su grandeza y de ponerme por debajo de ellos, así como una fuente de varios pisos, en la cual el piso más alto nutre al resto de pisos que están abajo, llenándolos de agua, es decir, de recursos… de vida.

ERROR Nº 4: CONFUNDIR LA TOMA DE CONOCIMIENTO CON LA TOMA DE CONCIENCIA.


La toma de conocimiento es cuando entiendo algo desde la razón… vale, ya lo estoy entendiendo, ya lo sé. Es totalmente racional, no siento nada o casi nada, sólo almaceno en mi cerebro unos datos a los cuales además doy poca o ninguna credibilidad.
La toma de conciencia es un sentir, es el “darse cuenta” de la gestalt, es una pequeña iluminación, como un coco que nos cae y entonces comprendemos, sentimos diferente, y por supuesto tomamos acción.

Imagina un ejemplo de una persona que tiene el proyecto sentido de Salvador de la familia, y que por lo tanto hace todo por los demás y nada por sí mismo. Vive en el sacrificio constante y sufriendo por los demás en exceso. Digamos que en su proyecto sentido sus padres tenían muchos problemas y que le concibieron para ayudarles a solucionarlos.

Si la persona toma conocimiento, simplemente sabe que su problema tiene que ver con lo que sus padres pasaban y pensaban durante su gestación. A veces, incluso puede haber un resentimiento a modo de “ellos son los culpables de que yo sufra”. Lo puede razonar, entender intelectualmente y hasta puede contarlo, pero no hace nada, o mejor dicho, sigue haciendo exactamente lo mismo.
Si la persona toma conciencia, automáticamente hay un cambio en su mirada, hay una emoción y muchas veces la necesidad de expresarla al momento a través del llanto, la risa, etc. Es como si dentro de sí “se ha movido algo”, algo es diferente y la consecuencia es tomar acción. En este caso empieza a vivir su vida. No hay resentir hacia papá y mamá, más bien hay una amorosa comprensión y liberación.
Esto es tomar conciencia.

ERROR Nº 5: VENIR A CONSULTA PARA AYUDAR/CAMBIAR A OTRO.

A veces de una manera muy consciente: Es que quiero ayudar a mi hermana que lo está pasando muy mal, y he pensado que si yo “corto” todo lo “malo” de mi familia, ella también se libera, ¿verdad?
Pues no, no funciona así, no tiene sentido venir a consulta con ese objetivo.
Cuando de corazón encontramos el recurso, la solución al conflicto de nuestro clan, entonces se podría decir que “inconscientemente damos permiso a los demás de que también se liberen”, pero dar permiso inconsciente no es lo mismo que sanar, curar o liberar al otro.
Lo que podemos entender es que no hay otro que liberar, y que en el fondo hay un deseo egoísta de que el otro esté bien para no tener que sufrir por él. Pues bien, eso es lo que hay que trabajar, el ¿porqué yo sufro si el otro no vive como yo creo que tiene que vivir?
Otras veces de manera inconsciente: la persona viene a consulta para poder decir que ha venido y que quiere solucionar su problema, pero en el fondo no quiere hacer ningún cambio… bueno sí! Quiere que cambie el otro! El que para su forma de mirar, es el culpable de su problema.
Estos son los errores principales cuando empezamos a indagar en nuestro transgeneracional.
No te tienes que sentir culpable si has caído en alguno de ellos (sería el error nº 6 jeje)… yo los conozco porque he caído en todos!!! Así que no te preocupes, sólo utiliza esta información para que tu camino sea un poco más ligero y no tropezar con piedras que ya te estoy avisando que están ahí.
Aún así, a veces necesitamos tropezar con esas piedras, y si es así, sólo sé muy amable contigo y date el tiempo que necesites.
Decirte que el hecho de tener un especialista que te acompaña en tu proceso puede ayudarte a vivirlo mejor y a veces a acelerarlo. Pero recuerda, un especialista, coach o terapeuta sólo te acompaña, el trabajo es tuyo.


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